Continuamos el viaje que comenzamos por la Europa Mediterránea, el norte de África y parte de Oriente Próximo y en México. Nuestro destino de hoy es Europa del Este. En esta zona de Europa, las sopas tienen un gran protagonismo que comparten con platos cuya base es la patata, la carne, las coles, las especias y las verduras. Y sí, el queso y el yogur también tienen un papel importante en su cocina. ¡Repasamos algunos de los platos más típicos de comida con y sin lactosa!
Börek, byrek o börek
Se trata de una empanada o pastel de origen turco que forma parte de la cocina de los países que fueron parte del Imperio Otomano. Lo encontrarás, pero de formas diferentes en Albania, Serbia, Bosnia, Croacia y Eslovenia. Se compra en panaderías o en puestos en la calle y se toma como una comida rápida, a menudo acompañada con yogur. En Serbia, muchos de ellos se rellenan con queso, pero también los hay de carne de ternera e incluso vacíos, los llamados burek prazan. En Bosnia y Herzegovina el burek se rellena de carne picada. Si le añaden queso feta y espinacas, se le llama zeljanica, al relleno únicamente de queso lo denominan sirnica y al de patata, krompiruša.
Borscht
Borscht es una de las sopas más populares en Europa del Este. De origen ruso, se elabora a base de remolacha, lo que le da su característico color. En cada uno de los países añaden a la base de remolacha ingredientes diferentes que la hacen única. Se suele añadir una cucharada de crema agria o yogur al final, siempre podéis pedir que no os la pongan si osi sois intolerantes o bien llevar en vuestro botiquín de viaje los comprimidos Nutira. Ah, y suele acompañarse con un buen vaso de vodka.
Gulash
En su receta tradicional húngara es una sopa, un caldo fino y picante con carne, normalmente de ternera. En el resto de países del Este de Europa se ha extendido como un estofado de carne picante. Ambas modalidades tienen un sabor muy similar, ya que se comparten el sabor a pimentón rojo que distingue el gulash del resto de guisos con carne.
Ćevapčići
Es un plato de carne picada, mezclada y especiada a la parrilla que tiene su origen también en el Imperio Otomano, y es una versión del kofta kebab típico en Medio Oriente. Son un plato central en Bosnia y muy populares en el resto de países de la zona, desde Eslovenia hasta Bulgaria. Se suelen servir con panes turcos, cebolla, crema agria, queso feta, una especie de nata montada turca llamada kajmak y un preparado a base de pimiento rojo o ajvar. ¡Pide los acompañamientos por separado o lleva Nutira contigo en la maleta ;)!